Diseño de arquitectura
Propongo que
profundicemos un poco más en, probablemente, el elemento arquitectónico más
importante en la iluminación natural: la ventana. Hasta la fecha, hemos
realizado dos apuntes anteriores, correspondientes a:
Vamos a desarrollar el
estudio de la altura de la ventana y cómo ello influye en la iluminación
natural. A continuación vemos el modelo de una oficina donde se localiza una
ventana longitudinal. La ventana va cambiando de tamaño, desde el 10% de la superficie
de fachada hasta el 75%:
Como podemos ver, las
ventanas que ocupan entre un 10 y un 20% de la superficie de fachada (equivalente
a un 4 y un 8% de la superficie de suelo) apenas proporcionan suficiente
iluminación natural.
Una ventana que ocupe
entre un 30% y un 40% de la superficie de fachada (equivalente a un 12 y un 16%
de la superficie de suelo) logra unos niveles de iluminación aceptables, ya que
aproximadamente la mitad de la oficina tiene 300 lux. Tamaños superiores de
ventana permiten una iluminación mayor. Esto se observa en el mapa de falso
color que mide la luminancia reflejada:
Obsérvese que conforme
más alto es el dintel de la ventana, mayor profundidad alcanza la luz, como
pudimos deducir en Diseño de ventanas I.
Este trabajo ha sido
desarrollado por el New Buildings Institute, el cual ha realizado un magnífico
trabajo en colaboración con la Universidad de Idaho y la de Washington. Mi más
sincera enhorabuena por este estudio.
Con esto no acaba todo,
seguiremos estudiando las ventanas más adelante.